La ONU declara el acceso a un medio ambiente limpio y sano como un derecho humano universal

El pasado 28 de julio, la Asamblea General de la ONU, adoptó una resolución que reconoce como un derecho humano universal el acceso a un medio ambiente sostenible, limpio y sano. 

Esta resolución está basada en un texto similar al del Consejo de Derechos Humanos, el cuál solicita a varios entes, entre ellos Estados, organizaciones internacionales y empresas, que aumenten sus acciones con el fin de tener un medio ambiente sano para todos. 

La resolución, basada en un texto similar adoptado el año pasado por el Consejo de Derechos Humanos, pide a los Estados, las organizaciones internacionales y las empresas que intensifiquen sus esfuerzos para garantizar un medio ambiente sano para todos. 

¿Qué puede cambiar con esta ley? 

 Según David Boyd, relator especial de la ONU sobre Derechos Humanos y Medio Ambiente, esta decisión cambiará la naturaleza misma de los derechos humanos,  “tener derecho a un medio ambiente sano cambia la perspectiva de la gente, que pasa de ‘mendigar’ a exigir a los gobiernos que actúen” argumenta Boyd. 

Por su parte, el Secretario General de la ONU, António Guterres, comentó que dicha iniciativa contribuirá a minimizar las injusticias medioambientales, a empoderar a la población, en especial aquella que se encuentra en situación de vulnerabilidad, y a que los Estados aceleren el cumplimiento de sus obligaciones. 

Sin embargo, cabe resaltar que esta iniciativa no es jurídicamente vinculante, es decir, que los países no están en la obligación legal de cumplirlo, pero podrá funcionar como un facilitador para obtener un medio ambiente sano y limpio y como una vía para que los ciudadanos puedan exigir mayor responsabilidad en esta materia a su gobierno. 

¿Qué amenazas se están combatiendo con esta nueva ley? 

Existen tres principales amenazas medioambientales que enfrenta actualmente la humanidad: el cambio climático, la contaminación y la pérdida de biodiversidad, siendo la contaminación del aire la mayor causa de enfermedad y muerte prematura a nivel mundial, con más de siete millones de personas que mueren anualmente debido al nivel de contaminación.